miércoles, 29 de abril de 2009

la cosecha



"EL REGRESO DEL CHACHAL DE LAS LETRAS, CHINASKI EN:
"LA COSECHA"

Lo inesperado, asedia
Entre pétalos inundados de lo que fue,
Mientras las manos esculpen una piel levemente conocida,
Y mi boca que recorre cada centímetro de tus mejillas para terminar en la tuya,
La misma que dijo No!
Y no pudo decir más porque tú lengua se ocupó de sorprender la mía,
Conociéndonos, más allá de la comunicación verbal,
En una catarsis frenética mientras el tiempo avanza,
Porque cada segundo es corto cuando se sabe que vendrá el final
Después de la ternura inconsciente,
Cuando la vergüenza es solo un antagonismo social,
Y tus pechos y mis dientes juegan según el código de los instintos,
Ver como tus cabellos desordenados esconden tú cara y tú voz desnuda,
Donde ya no hay necesidad de hablar para sentir que no hay nadie más,
Sólo nosotros y el silencioso bullicio de un inhala exhala exsangüe,
Es todo tan exquisito, la vida injusta continúa,
y ya no es invierno aunque el calendario insista,
y el techo es una pantalla que reproduce cada segundo
en una ronda de fotografías de segundos imposibles pero probables.
Duermes, adormeciendo mi brazo izquierdo,
Y mi brazo derecho se pierde entre tus los tuyos,
Entre el calor y ese universo infinito, lleno de estrellas,
Intentando alcanzar esa constelación prohibida para la óptica,
Entonces es el final, el tiempo se detiene, las manos se zafan,
El brazo izquierdo despierta con el susurro dulce de la complicidad,
Con la pregunta interna, y podrían ser todas las noches, pero algo lo impide,
El corazón y la razón responden la pregunta, ajena,
Por que el amor no es el protagonista de esta historia, si no de otras, ajenas
Y todo termina,
Con un beso en la mejilla,
Con la mano en la cerradura,
Entre los pájaros y el sonido del tráfico del domingo.
Es invierno, el calendario está en lo cierto,
Pero ya no somos los mismos
Sumamos otra historia,
Un recuerdo consciente que romperá a veces nuestra inmutable cotidianidad.

No hay comentarios: